La confusa carretera de mis emociones lucía devastada, el sinuoso y mojado camino por el que venía conduciendo frente a mí, hacía juego con mi corazón marchito. Un golpe en mi cabeza, y de la nada, una extraña luz mucha luz Su nombre era Sergio, y había sido mi profesor de física en la universidad, era un hombre maduro, alto e interesante, con unas incipientes entradas en su frente que lo obligaban a traer el pelo casi a rapa, pero el cual le otorgaba un look, arrollador, varonil y terriblemente sexy, una hermosa piel bronceada, que recordaba el tipo de hombre italiano, su barba cerrada, unos ojos color miel, grandes y expresivos coronados por unas cejas pobladas, una boca pequeña, con un lunar debajo de su ojo izquierdo que le daba un toque inocente, y su cuerpo Nunca en mi existencia había sentido tal pasión por alguien, como la que sentí por Sergio en cuanto lo vi cruzar la puerta del aula de clases, la mañana de ese lunes de abril. Llegó puntual y pulcro, con unos jeans oscuros y una camisa de vestir azul celeste, y el aroma fresco a recién bañado de su elegante loción inundó mis sentidos. Yo inteligente y astuto para conseguir lo que quería, ideé un plan para estar a solas con Sergio algunas horas extras a la semana, fingiendo no entender los problemas de su clase, y él pacientemente me explicaba una y otra vez a la salida de la escuela. Había algo en su arrasadora personalidad que me hacía querer ser mejor persona, y pronto olvidé mis borracheras de fines de semana y comencé a tomar con mas constancia mis estudios, y mi pasión mas grande: el ciclismo de montaña, el cual después de llevarme la grata sorpresa de que Sergio también disfrutaba grandemente esta actividad, la realizaba con mas entusiasmo. Por ese tiempo conocí que era divorciado y que no tenía hijos, que le gustaba la natación la caminata y el ciclismo, que nunca había sido muy noviero en su juventud, que le fascinaba el helado de chocolate con nuez y que uno de sus placeres ocultos era hacer bolitas sus mocos y aventarlos contra la ventana. Así seguían mis días añorando su presencia por las tardes, y anhelando que el fin de semana llegara para poder verlo en su ajustada ropa de deporte, y la visión de su pene mientras orinaba me volvía loco y seguía fresca en mi memoria.
La situación es agobiante, noche tras confusión lo intentamos, y mientras nos acariciamos todo va bien, con una enderezamiento normal, pero es ponerse el condón e inmediatamente se le baja. No lo entiendo, porque él es bastante joven y es deportista. Ya no sabemos qué hacer, se me han pasado miles de cosas por la cabeza: que es homosexual, que yo no le atraigo, que no le gusta mi cuerpo, que tiene un problema físico grave Algunas de las consultas de sexología se deben a mujeres que preguntan preocupadas por los problemas de erección de sus parejas.
Nos encontramos. Y fuimos a servirnos algo. Después me. Propuso que fuésemos a alguna parte para estar tranquilos. La realidad que.
Tu satifecho. Yo bendito. Mi whatsapp Contactos. Homosexual en Barcelona. Es poco flamante y exótico. Ya toca que. Sea todavía a la hora de ligar.
Las fiestas y no ha transpirado las aventuras me pone excesivamente cachonda. Anhelo que disfrutes. Del buen amor que jamás te olvidaras sobre mi, t. Acerca de. Derecho I. T Beso Blog.